
DIBUJO
¿Una imagen vale más que mil palabras?
POR NATALIA SERRANO
11 de mayo de 2023
Seguro que habréis escuchado mil veces esa frase de “Una imagen vale más que mil palabras”.
Pues sí. En muchos casos, así es.
Sin embargo, pensadlo a nivel emocional.
Una foto enternecedora puede hacernos derramar una lágrima, dos lágrimas… ¿Y un texto explícito, profundo y cautivador? Es capaz de hacernos viajar a 10.000km de dónde estemos en ese momento.
¿Y si juntamos estas dos bombas de relojería?
Una de las cosas que me llamó más cuando empecé publicidad, era el abanico infinito de posibilidades que esta podía ofrecer.
Como de un término que utilizamos “más o menos” a menudo, conocemos tan poco.
¿Publicidad? Una imagen o un vídeo, acompañados de una buena frase o texto. Esa, es la publicidad que se nos queda grabada a fuego en la cabeza.
Si me preguntan por dos cosas que sigo haciendo desde que era pequeña, diría sin dudar, que tanto escribir como dibujar.
Siempre las he concebido de la mano y aunque al principio fueran más cuentos con viñetas, mis gustos y preferencias fueron cambiando y con la edad, empecé a escribir textos más profundos y pintar dibujos más elaborados. ¿Lógico no?
Como os decía antes, si bien una imagen de por sí puede emocionarnos y lo mismo sucede con un texto, imaginaros la potencia que pueden llegar a tener juntos.
Pero no me voy a ir por las ramas. Aquí me gustaría hablaros más del dibujo.
De cómo a lo largo de nuestras vidas nos enseñan a dibujar. Empezamos por rayas, círculos, cuadrados y cada uno desarrolla sus capacidades visuales como más le gusta.
En mi caso, seguí pintando y pintando para mí. Paisajes, escenas de la vida cotidiana, animales… Las caras todavía son mi punto débil así que ¡Tendremos que esperar más para ver algún retrato que merezca la pena!
Sin embargo, esa es la magia del dibujo. El cielo, es el límite.
Todo lo que se nos pase por la imaginación, puede ser plasmado en un papel, un lienzo o si me apuráis, hasta en una servilleta.
Y que poder tiene ser capaz de transmitir eso a los demás. Que vivan a través de un dibujo, lo mismo que estabas imaginándote en tu cabeza. Creo, que por eso disfruto tanto dibujando.
¿Y poder darle voz a esos dibujos? Una fantasía.
Volvemos al punto de partida. Dibujo y escritura. No se me ocurre una mejor combinación.
Lo bueno de estas dos ramas es que ambas se pueden aplicar en cualquier ámbito, cualquier sector…
¿Mi favorito? La moda. Y dar rienda suelta a la imaginación en una industria tan amplia: la composición perfecta.
Así que sí. De mis años de publicidad, me quedo con las clases de redacción publicitaria y dirección de arte.
¿Qué puedo decir? Soy una creativa empedernida.